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domingo, 5 de febrero de 2012

Cosas que pasan en una discoteque




Salir a bailar con las amigas a una discoteque es un motivo para distraerse, para una noche de juerga y quizás, sólo quizás, conocer a alguien. Esa es la diferencia y la gracia de ser mujer; que no necesitamos de un hombre para bailar, sin embargo para los hombres es necesario bailar con una mujer. Dejemos en excepción a las parejas del mismo sexo, los europeos y música electrónica que no se necesita nada, ni nadie, sólo la música y moverse al ritmo de ella.
Anoche salí con unas amigas a bailar, nos tomamos unos traguitos y ya eramos dueñas de la pista. En pocos minutos unos tipos se acercaron, nos tomaron de la mano y nos sacaron a bailar. Lo miré y la verdad no era para nada de mi agrado por lo que bajé la vista, no lo pesqué y moví la cabeza de un lado para otro. Pero no se conformó con mi "No" por respuesta, por lo que siguió insistiendo. Ahora veo por qué necesitan "entrar en calor" con el copete antes de salir a bailar y es que hay que tener una gran personalidad, mentalizarse y asegurarse de sí mismo para aceptar ser rechazado una, dos, tres, o hasta diez veces durante una noche. Un golpe muy duro para la autoestima. 
Para muchos hombres pareciera ser esencial recibir un "sí" para bailar... imagínense ¡es sólo bailar! Nadie te asegura que pase algo. Sin embargo, recibir un no por respuesta es simplemente un golpe al ego y quienes sufren de inseguridad suelen quedar traumados. Anoche lo pensé, dije "capaz cómo haya quedado este cabro no se va a atrever a sacar a nadie nunca más". Pasaron unos minutos y volvió a la pelea. Insistí en mi respuesta negativa, no estaba ni ahí con bailar con él porque más encima no era muy educado que digamos.
A las mujeres no nos gusta que nos insistan, que nos rueguen o que nos hagan sentir culpables porque no hacemos lo que nuestro interlocutor quiere, sobre todo si se trata de una discoteque como escenario. Ahí uno no se fija, generalmente, en la bondad de una persona, es medio difícil ver debajo de la ropa y darse cuenta de lo que tiene en su corazón, quizás es lo que busco pero ¿si no se produce esa química del principio? A una discoteque uno no va a buscar pareja, si no solamente diversión y quizás, SÓLO QUIZÁS y en menor medida, quedar en contacto para conocer realmente a una persona. 

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