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miércoles, 2 de marzo de 2011

¿Amor de pobre, amor sincero?

Sinceramente, nunca crei tener dramas con las clases sociales. Me consideraba una mujer abierta y jamás clasista, hasta que llegó este personaje. En la noche todos los gatos son negros y es verdad, como que las diferencias entre clases no se notan con las luces de una discoteque, no es hasta el otro día cuando escuchamos la voz por teléfono que decimos "mmm ... no es lo que yo pensaba". Así me pasó. Imaginate me trata de usted, menos mal que no tiene problemas con el "ch", ahí ya sería como musho lusho. Pucha aunque uno tenga una idea del amor tan utópica, que diga que nada los pueda separar... igual como que complica que la otra persona sea diferente a uno, no tenga los mismos intereses económicos. Estoy hablando como vieja, ¡una lata!
Hay mujeres que les gusta que le digan "usted", a mí sinceramente no. Lo encuentro chulo. También me carga que me traten de " mi amor" al rato de haberme conocido, con suerte saben mi nombre, un poco patudo ¿no? Pero un indicio para que cumpla con la categoría flaite es su "Facebook", dependiendo la foto que tiene en el perfil sabremos de qué clase de flaite estamos hablando. Si el susodicho aparece mostrando sus caluguitas, con una mirada sensual, una pose erótica. ¡Sí! estamos hablando de flaite CON TODAS SUS LETRAS.
Ahora cuando uno tiene una "profesión" es cuando empieza a importar qué hace la otra persona, cuando estamos recién empezando con los estudios como que da lo mismo, pero ahora, sin querer, nos fijamos en el asunto. Sí, parece que entré en el sistema neoliberal, consumista... ¡Qué lata! 
Pero veo el vaso medio lleno. Nunca me había sentido como una reina con alguien, tan bien atendida, que te ofrecieran el mundo entero a tus pies, que te inviten allá y acá, que te den la importancia en simples detalles de que andan interesados en ti. Y eso ningún lais (léase cuico o adinerado), ni universitario, ni profesional se había comportado así conmigo... Muy extraño ¿no?
Los prejuicios te pueden alejar de alguien que en verdad vale la pena, de una persona que puede amarte como lo imaginabas, pero no... muchas veces preferimos el "qué dirán"... además nadie dice que nos casaremos... asi que... chiquillas hay que dejarse querer, no aprovecharse tampoco, pero si llega un principe azul, ¿cómo no averiguar de qué se trata? si no todos los días se vive algo así. Tal como dice un reggaeton, amor de pobre, amor sincero... ¿será así de cierto? Tanta maravilla me hace dudar...

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